
Era un sueño repetido.
Cambiaba el sonido,
meticuloso
de cuerdas cantarinas.
Como un arroyo deslizándose
por los despeñaderos.
Música de agua, fluir
de pensamientos.
Alborozo quieto.
Herrumbre distraida
en vanos pensamientos.
Navegaba sobre
una canoa,
alfombrada de estío.
Los pájaros
deambulaban sin destino.
Las flores
perfilaban sus colores
en brillos diamantinos.
No se si el día,
o la noche, deslumbraba
de caprichos.
Sólo se que en el sueño,
el río, no era río.
El cielo, no era azul,
ni la arboleda verde.
El tiempo desplazaba
los recuerdos.
Se inundaba misterioso
en desenfreno.
Mientras trataba de develar
los restos, dormía
acurrucada en la canoa,
a la deriva del silencio.
Si despierto...Volveré
a soñar, ese universo.
.
Ester-Colibrí